Tres policías – entre ellos un comisario – y dos barras fueron detenidos tras el violento desalojo de una vendedora ambulante del puente de la estación de Banfield. Se determinó que la mujer debía pagarle a la hinchada del Taladro para trabajar mientras que los efectivos nunca registraron el ingreso del extorsionador a la comisaría.
Todo comenzó el 27 de julio de este año cuando un grupo de barras del Taladro “desalojó” a una vendedora que se encontraba en el puente de la estación de Banfield. La mujer filmó cómo los sujetos le tiraban la mercadería y la sacaban del lugar.
Tras el pedido de auxilio, un efectivo de la Policía Federal detuvo a uno de los barras, que la mujer pudo identificar como el principal agresor.
Fuentes de la investigación informaron a Expedientecero.com.ar que la UFI 8 de Lomas de Zamora logró acreditar las transferencias de dinero que la vendedora que tenía que hacerle a los barras para que la dejaran instalar su puesto. Algo que se repetiría con otros vendedores.
Cuando – en móviles separados – la vendedora y el policía de la Federal con el barra llegaron a la Comisaría de Banfield ocurrió algo llamativo. Los efectivos de esa seccional nunca registraron el ingreso del barra. Solo le tomaron a la mujer una denuncia por “amenazas” – en realidad había una extorsión –, pero no dieron intervención a la UFI en turno.
El fiscal Jorge Grieco y el agente fiscal Alejandro Alleno, de la UFI 8 de Lomas, en colaboración con personal de área de Asuntos Internos de la Policía Bonaerense, determinaron por filmaciones que el barra detenido se fue poco después de la denuncia de la mujer, por la puerta principal de la comisaría. Lo habían ido a buscar otros hinchas del Taladro que terminaron dialogando tranquilamente con los policías.
La investigación avanzó en dos frentes: el accionar extorsivo de los barras de Banfield y los incumplimientos de los policías en el procedimiento posterior a la detención del acusado.
En las últimas horas, se realizaron varios allanamientos en los que fueron detenidos dos barras de Banfield, imputados de “extorsión”, y tres policías – un comisario, un jefe de calle y oficial de Servicio – de las Comisarías de Banfield y Lomas de Zamora. Los uniformados quedaron imputados por “incumplimiento de los deberes de funcionario público”.
En los allanamientos – que incluyeron las dos comisarías mencionadas – se secuestraron celulares y documentación importante para el avance de la causa.
En ese sentido, no se descartan nuevas detenciones y la profundización de una línea de sospecha: el presunto vínculo entre los barras de Banfield y efectivos policiales.