Por Juan Manuel Negri. En las últimas horas, el peronismo habría llegado a un principio de acuerdo para destrabar la feroz interna que, como contó este medio, mantiene frenado en mesa de entradas el paquetazo de 129 pliegos judiciales que Axel Kicillof remitió la semana pasada al Senado. La “pipa de la paz” se habría fumado este miércoles en una reunión entre la vicegobernadora, Verónica Magario, y el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Juan Martín Mena.
Ocurre que, la titular del Senado bonaerense nunca giró la frondosa partida de expedientes a la comisión de Asuntos Constitucionales y Acuerdos (ACA), que preside el camporista Emmanuel González Santalla, disconforme por la exclusión de una serie de nombres del departamento judicial La Matanza que venía solicitando. El “piquete” en mesa de entradas le valió a la vice de Kicillof una dura misiva de Santalla, en la que el legislador de Avellaneda le reclamaba el giro urgente al cuerpo que preside. Según reconstruyó este medio, la carta no fue recibida por la privada de Magario.
Ahora, la “fumata blanca” le habría costado al ministro Mena unos nueve pliegos judiciales, para el nombramiento de siete fiscales y un juez de Cámara del terruño de la presidenta del Senado bonaerense, que estarían próximos a ingresar, una vez que el Gobernador estampe su firma. El noveno se trata de un expediente para designar a un juez del Tribunal en lo Criminal del departamento judicial de Azul, que ya ingresó por mesa de entradas. “Era un nombre que estaba pendiente y había sido pedido”, alegó una fuente, respecto al pliego de la Séptima sección electoral.
El Ejecutivo estaría próximo a remitir a la Cámara alta los otros ocho pliegos judiciales de La Matanza entre hoy y mañana. “Con esta situación los 129 postulantes estaban muy nerviosos, atentos a lo que ocurrió en 2022 cuando se frenó una tanda y se tardó un año y medio en aprobarla en el recinto”, describió uno de los actores consultados por Diputados Bonaerenses.
En este escenario, una vez que ingresen los ocho pliegos judiciales del departamento judicial de La Matanza, con garantías en mano, la Vicegobernadora firmaría el giro a comisiones de todo el paquetazo, que se engrosaría de 129 a 138, y levantaría el “piquete” realizado en mesa de entradas. Si bien en los pasillos de la Legislatura bonaerense se especuló con la posible influencia del jefe de bloque de los diputados de Unión por la Patria y vicepresidente del Consejo de la Magistratura, Facundo Tignanelli, desde La Cámpora lo desmientieron de manera rotunda.
Desde las huestes de la organización que lidera Máximo Kirchner alegaron que los ocho nuevo pliegos de La Matanza estaban incluidos en el “plan original” que propuso el legislador, también oriundo del populoso distrito de la Tercera sección electoral, y que Magario habría dado el visto bueno y señalado que no querían que salieran esos expedientes. Además, integrantes de La Cámpora dijeron a este medio que cuando Mena envió el paquete de 129 expedientes el jefe comunal de ese distrito, Fernando Espinoza, le bajó el pulgar aduciendo “no estar al tanto”. “En la reunión el Ministro le planteó que debía destrabar el tema con el intendente porque ella había dado el concentimiento inicial, tras lo cual seguramente se reunió y Espinoza le dio el okay“, descargaron. Por su parte, desde el entorno de la Vicegobernadora no hicieron comentarios sobre el tema.
En cuanto al procedimiento, lo que resta es un extenso proceso que recién comenzaría, con suerte, la segunda semana de septiembre: cuando los expedientes lleguen a la comisión de ACA, el cuerpo que preside Santalla deberá cursar sendos pedidos de informes sobre los antecedentes penales actualizados de los 138 postulantes, requerimientos a la Corte Suprema de Justicia bonaerense sobre posibles sumarios, a los Colegios de Abogados sobre probables sanciones y a la Secretaría Permanente del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y funcionarios de la provincia de Buenos Aires, por eventuales jurys.
“Esta serie de informes se va a demorar unos cuantos días. Va a ser materialmente imposible que comencemos a trabajar la semana que viene”, explicó una fuente al tanto del procedimiento. Luego de ese paso administrativo, quedarán dos o tres días “intensos” de trabajo en el Salón Dorado del Senado bonaerense para concretar las entrevistas presenciales al conjunto de aspirantes a la Justicia provincial.
Con los nueve expedientes, el paquetazo de pliegos judiciales quedaría conformado por 89 jueces, 38 fiscales y 10 defensores oficiales y un asesor de incapaces. Como dio cuenta este medio, la interna peronista exhibe las recurrentes dificultades que arrastra un Senado bonaerense completamente loteado para enhebrar acuerdos que le permitan regularizar la situación de la atiborrada Justicia de la provincia de Buenos Aires que, de acuerdo a la fuente consultada, acumula entre 700 y 1.500 vacantes.
El nombramiento de magistrados requiere de paciencia, diálogo y consensos, aptitudes que no son frecuentes en la Cámara alta, aunque, claro, hay algunas contadas excepciones. Una prueba de ello es que, a lo largo de su administración inicial, Kicillof logró que el parlamento apenas preste acuerdo para unos 60 pliegos judiciales. Esa inercia se rompió en mayo pasado con la aprobación de los primeros 46 expedientes de su segundo mandato, lo que arroja poco más de un centenar en cinco años. Una gota de agua en el desierto de la Justicia provincial.
Fuente: diputadosbsas.com.ar
